El cacique se convierte en señor feudal, se llama a sí mismo cristiano viejo, de antigua sangre señorial, el guanche y sus descendientes son tratados como escoria y se valen de la ignorancia del pueblo.
El cacique es castigador, chantajista, falso, engañador y tirano, se aprovecha impunemente de las mujeres y sus hijas, explota al pueblo y exige reverencia. Todo este entramado va calando y marcando la forma del ser canario.
La espada, la cruz y la vara del cacique representan su ley.
A pesar de la “supuesta” mezcla de razas, el aborigen, el pueblo guanche mas puro continua aislado en las zonas mas pobres de las islas, en las montañas, son los magos (magec), el campesino.
Mientras en las incipientes ciudades se ridiculiza al mago y es considerado ignorante, bruto y desconfiado.
Desde el punto de vista cultural está desprovisto y es socialmente marginado, se convierte en inadaptado y recurre a vicios que descarguen su situación ambigua.
La raíz guanche y su entorno son los ambientes en que se desarrollará la “canariedad” tras los primeros años.
El canario se crece en el sistema del cacique, de dependencia, inseguridad, déspota y vacilante. En canario se hace en calor maternal, se convierte en su símbolo.
Todo en conglomerado de trabajo, tierra, piratas, iglesia, milicia, comercio, política, Europa y América van conformando un modelo de canariedad bajo la sombra y amparo de la madre.
Las islas se encuentran “aisladas” y el mar se convierte en frontera, a veces insalvable, al mismo tiempo es una gran autopista, una vía de escape, saltan por el mar miles de familias canarias acuciadas por las injustas leyes extranjeras y el hambre. América se convierte en la tierra prometida.
Después de la conquista los españoles continúan con su negocio de pillaje en la vecina África, Europa los rechaza, en el futuro esas razias en la costa africana traerá como consecuencia invasiones piraticas de diverso género. Los españoles atesoran riqueza en enemigos.
Con todo esto se va conformando en el canario una desconfianza que es la clave para comprender su actitud.
El canario actual tiene mucho de americano, es amable, servicial, aunque cada isla tenga sus peculiaridades propias. Hay mas humanidad pero también mas recelo, como se diría hoy está mas “quemado”. También existe diferencia entre el hombre del campo y el de costa, donde existe mas comunicación con el exterior.
Los diferentes condicionantes deprimen el alma canaria que busca refugio en las costumbres de los ancestros sobreponiéndolas a las nuevas adquiridas, el canario se refugia en el canto triste de la folia, la fiesta, la parranda, los amigos, sin dejar de lado la familia, este jolgorio enciende con arrebato el apasionado espíritu canario, creando sin saberlo el fuerte símbolo del ser canario. Conviven la alegría y la nostalgia.
La dura forma de vivir del canario va creando un inexpugnable impotencia, creando un clima de inferioridad que aún perdura, acelerando un sufrimiento que buscará su vía de escape.
El canario en un gran trabajador, no le teme a ningún tipo de labor y se entrega con pasión, se esfuerza y lleva en la sangre la calma del pastor guanche.
Canarias no posee materias primas, desde siempre ha vivido de un monocultivo, la caña, la vid, la orchilla, el plátano y hoy el turismo, no existe industria de ningún tipo y la dependencia del exterior es total, es la ruina económica del pueblo, los bienes materiales están concentrados en unos pocos caciques.
Parece que los consuetudinarios gobernantes, los de ayer y también los de hoy estiman que así debe ser y la escasa industria pesquera ha muerto, debido a la alocada cabeza política de algunos mandatarios.
En pleno siglo 21 la agricultura se practica con los mismos métodos de la época imperial romana, la ganadería es raquítica, solo de vital subsistencia. Debido a la dejadez política de siempre el rendimiento económico es muy pobre. La actividad portuaria y aeroportuaria, en manos inadecuadas, no benefician al pueblo.
La Historia es claramente diáfana de la situación económica de Canarias, la cultura, la sanidad y la educación, pilares fundamentales de la vida social, son deplorables, todo esto, unido al ser pasivo del canario da al traste con una visión de futuro risueño para Canarias. Da la impresión que todo está maquinalmente pensado para que sea así, las mentes diabólicas han creado un sistema que divide, enfrenta y empobrece al canario, mientras con mentiras y falsas promesas van entreteniendo su alma y su vida.
A pesar de todo la nobleza del canario es preponderante, el ser generoso, la magua del pasado, la pobreza y la solidaridad son el germen de su ser canario.
3 comentarios:
mui buena y mui cierta sus palabras, los canarios son los hijos directos de los guanche, son marroquis de origen, y algun dia volveran a estar juntos a sus hermanos marroquis que tienen un lugar en sus corazones para sus hermanos canarios de sangre.
españa dejara sus colonias africanas y marruecos sera por fin entera.
Sr. Anónimo: Estimo que ud. es árabe y por eso escribe tal cosa.
Su confusión y desconocimiento de la Historia es abrumadora y lamentable.
Los guanches llegaron a Canarias mucho antes de la invasión árabe al norte de África. Guanches y árabes no tienen nada en común.
Aunque actualmente en los paises árabes exite algo de raza bereber o tamazigh, son en realidad razas completamente distintas.
Siento sacarlo de su error.
gracias, gracias por responder. no soy arabe, ese es un error. en marruecos hay pocas gentes de origen arabe, solo familia real y alguna nobleza son de origen arabe, 10% . el pueblo todo es de origen bereber como dice usted en su blogger que el pueblo canario es. imazighen todos.
saludos y paz a los hermanos canarios.
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